La tecnología siempre fue un factor fundamental en todas las revoluciones industriales que tuvieron lugar en los últimos siglos.
La revolución industrial hace referencia al cambio de herramientas artesanales por máquinas, y al uso de la energía humana por energía motriz, transformando para siempre a los medios de producción industrial y de transporte, generando asimismo cambios en las relaciones laborales y consolidando el proceso de formación del capitalismo.