El artículo 32 del Reglamento para la Aplicación de la Ley de Régimen Tributario Interno (RLRTI) constituye una herramienta clave para el adecuado cumplimiento de las obligaciones fiscales en Ecuador. Su relevancia radica en que permite determinar el impuesto sobre la renta en función de la ganancia neta efectivamente obtenida por el arrendamiento de bienes inmuebles, y no sobre el total de los ingresos brutos percibidos.
Al establecer de forma específica los gastos deducibles vinculados a esta actividad como mantenimiento, impuestos prediales, seguros y servicios básicos, el artículo reconoce que el arrendamiento implica costos inherentes que deben ser considerados al momento de calcular la base imponible. De esta manera, promueve la equidad tributaria, fomenta la transparencia y proporciona a los contribuyentes un marco claro para determinar sus ingresos gravados.
No obstante, para que su aplicación sea eficaz, es fundamental que la Administración Tributaria actúe con eficiencia, especialmente en la revisión y aceptación de gastos extraordinarios o no recurrentes, garantizando así seguridad jurídica y confianza en el sistema tributario.